En Argelia, un empleado de oficina genera cerca de 2 kilogramos de residuos al mes. Papel, tóner de impresora, botellas y vasos de plástico, cápsulas de café… toneladas de productos que terminan en las basuras de las empresas sin ser valorizados. Un ingeniero en hidrocarburos tuvo la idea de lanzar un sistema de clasificación y reciclaje único en el país que permite a las empresas externalizar la gestión de residuos y ser certificadas eco-responsables.
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Reciclar las oficinas de Argelia: un ingeniero transforma los residuos en recurso
22-med – octubre 2025
• En Argelia, un ingeniero del sector petrolero reinventa la gestión de los residuos administrativos.
• Su sistema de clasificación y reciclaje transforma las basuras de oficina en un modelo de eco-responsabilidad.
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Se puede ser ingeniero en la industria petrolera -reconocida como extremadamente contaminante- y cambiar de trayectoria profesional para dedicarse al reciclaje y la protección del medio ambiente. Esta elección atípica, Walid Hadjadj, de 36 años, la tomó en 2020 para convertirse en eco-emprendedor. «He realizado la mayor parte de mi carrera en el refinado de petróleo, luego fui nombrado en el ministerio de Energía en un departamento encargado de las cuestiones relacionadas con la ingeniería y la protección del patrimonio energético», explica Walid.
Es en esta estructura oficial donde toma conciencia de los desafíos medioambientales. «Comencé a reflexionar sobre la creación de un marco profesional que respete valores y que sea lo suficientemente interesante desde el punto de vista financiero ». En 2019, Walid Hadjadj lanza Revadex, una plataforma que conecta a los generadores de residuos con los compradores y recicladores.
Deja su puesto en enero de 2020 y aprovecha el período de pandemia del Covid para profundizar en la reflexión sobre las actividades de su joven empresa.
El clic ocurre cuando uno de sus clientes le pide realizar una operación de desarchivación. «Es la destrucción de archivos lo que me dio la idea de crear un sistema capaz de gestionar los residuos en los espacios administrativos ».
Walid Hadjadj estudia el mercado y constata que la gran mayoría de las empresas utilizan un solo contenedor para deshacerse de los papeles así como de todos los residuos generados por los empleados.
Servicio llave en mano
El concepto toma forma muy rápidamente. Revadex instala grandes cajas de cartón en las oficinas que, una vez llenas de residuos, son enviadas a centros de reciclaje asociados. «Ofrecemos un servicio llave en mano de clasificación, reciclaje y recolección de residuos de oficina. Cada caja tiene un destino específico: para papel, botellas, tapones de plástico, latas, vasos y tóners de impresoras. También hemos desarrollado un módulo de formación de unos treinta minutos para explicar a los colaboradores los gestos de clasificación y los errores a evitar, por qué lo hacemos, todo eso».
Walid Hadjadj destaca los beneficios para las empresas. «Además de externalizar la gestión de residuos, disponen de un espacio digital que les permite tener en tiempo real las cantidades recogidas y recicladas. Nuestro punto fuerte es la entrega de un certificado que atestigua que nuestros clientes están comprometidos con la reducción del impacto medioambiental ». Según él, algunas empresas incluso han logrado ahorrar al reducir las cantidades de productos disponibles para sus colaboradores y al luchar contra el desperdicio. «La instalación de una fuente de agua fresca en los pasillos limita el uso de botellas de plástico, que a veces son accesibles de forma gratuita. Lo mismo para el café en cápsulas, es preferible usar máquinas de granos ».
La segunda vida de los residuos de oficina
¿Qué sucede con estos residuos después de la fase de clasificación? Revadex los envía a centros de reciclaje, seleccionados según criterios muy precisos. El papel se transforma en subproducto para la fabricación de cartón, los plásticos se convierten en guata de poliéster y el aluminio de las cápsulas se utiliza para la producción de aleaciones. En cuanto al poso de café, es recuperado por una granja pedagógica de la región de Argel para producir compost.
«Tratamos unas diez toneladas de residuos al mes a través de nuestra red que se extiende a las principales ciudades del país. En cinco años de actividad, los datos que hemos recopilado indican que un colaborador genera 1,8 kg de residuos al mes. Por lo tanto, estamos en un segmento prometedor, útil y escalable», señala Walid Hadjadj, quien anuncia su intención de invertir próximamente en Túnez.
Por el momento, Revadex es una pequeña PYME de unos diez empleados. Walid Hadjadj tiene la ambición de convertirla en un actor clave en el ámbito de la gestión y recuperación de residuos. Un objetivo que depende directamente del compromiso de los líderes empresariales argelinos a favor de la eco-responsabilidad.
Foto de portada: la empresa trata unas diez toneladas de residuos al mes © Revadex