Desde la prehistoria hasta la era colonial francesa, pasando por los períodos romano, vándalo e islámico, el patrimonio en Argelia aún no ha sido completamente estudiado. Hoy en día, la problemática de la protección de sus bienes históricos se plantea con agudeza. Un campo en el que trabajan científicos que recurren a nuevas tecnologías para asegurar su preservación.
Argelia cuenta con una gran cantidad de sitios históricos, siete de los cuales están inscritos en el patrimonio mundial de la UNESCO. Entre estos sitios se encuentran la Casbah de Argel, las ruinas romanas de Tipaza y el Tassili n'Ajjer considerado como el museo al aire libre más grande con más de 15,000 dibujos y grabados que datan del 6000 a.C. Estos sitios son solo una pequeña parte del patrimonio histórico disperso en todo el territorio argelino. Además de los aspectos relacionados con la investigación y el estudio de estos bienes, la urgencia hoy en día es protegerlos de la destrucción y el saqueo.
Investigadora en el Centro de Investigación en Ordenación del Territorio (CRAT) en Constantina, Meriem Seghiri Bendjaballah lidera un equipo encargado de trabajar en la aplicación de nuevas tecnologías relacionadas con la preservación del patrimonio cultural y natural. Arquitecta de formación, su trayectoria académica se centra en el estudio de monumentos históricos de Argelia. Ella es parte de los científicos que han tomado conciencia de la necesidad de proteger el patrimonio mediante el uso de soluciones tecnológicas. Junto con sus colegas, pasó rápidamente de la teoría a la práctica. "Desde su creación en 2019, el CRAT reclutó investigadores de diferentes especialidades. En cuanto a la preservación del patrimonio, estamos obligados a trabajar en un marco interdisciplinario", explica. Arquitectos, topógrafos, ingenieros civiles, desarrolladores informáticos... cada uno tiene un papel específico. "En primer lugar, propusimos un proyecto de protección del Imedghassen (foto principal), un mausoleo númida que data de la antigüedad. Conozco bien este sitio porque le dediqué mi tesis doctoral. Por lo tanto, creamos un modelo en tres dimensiones para proponer el desarrollo de este sitio histórico", destaca Meriem.

Escáner láser de nube de puntos
De hecho, el uso de las últimas tecnologías realmente comenzó con la llegada al equipo de Yasser Nassim Benzagouta, doctor en arte de construir y urbanismo, y especialista en modelado de información de edificios (BIM, Building Information Modeling). Su llegada coincidió con la adquisición por parte del centro de investigación de un escáner láser de nube de puntos. Herramienta indispensable hoy en día, el escáner de nube de puntos permite la digitalización en tres dimensiones de un espacio u objeto real. Compuesta por miles de millones de puntos, esta adquisición 3D se mide mediante fotogrametría, y luego se transfiere a un sistema de coordenadas. Al aumentar la densidad de la captura, se obtiene una nube de puntos de gran precisión.

El primer proyecto del CRAT consistió en realizar una visita virtual al Palacio del Bey de Constantine. Construido entre 1826 y 1835 por el Hadj Ahmed, último Bey de Constantine, el sitio es hoy un museo dedicado al período otomano. “Esta iniciativa también permitió obtener un gemelo digital del palacio”, señala la investigadora. Desde este primer proyecto, el CRAT se ha convertido en un referente en la digitalización del patrimonio. “No somos realmente pioneros, ya que ha habido operaciones de escaneo de monumentos históricos anteriormente. Pero los trabajos rara vez se han completado y, por lo tanto, nunca se han explotado ni compartido. Recientemente hemos realizado el gemelo digital del teatro de Constantine, construido en 1883, así como el escaneo de la fuente Ain el bled de Mila, una de las últimas fuentes romanas aún en funcionamiento. Nuestro objetivo es convertir el CRAT en un operador especializado en la digitalización del patrimonio”, agrega Meriem Seghiri Bendjaballah.
La próxima fase implicará el uso de drones equipados con escáneres láser para recopilar y analizar datos sobre grandes superficies.
Escaneo de una ciudad antigua en 15 minutos con un dron
El CRAT colabora especialmente con Fawzi Doumaz, investigador senior y responsable del laboratorio de Arqueo-Geomática y Geofísica Experimental en el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología de Roma. Ingeniero en geotecnia graduado de la Universidad de Houari-Boumediene en Argel, trabajó en el Centro de Investigación en Astronomía, Astrofísica y Geofísica (CRAAG). A mediados de la década de 1990, se trasladó a Italia donde realiza varios trabajos, especialmente utilizando la geomática. Esta especialidad reúne todas las técnicas informáticas aplicadas a las ciencias de la tierra y la arqueología para acciones de preservación del patrimonio. "Entré en el campo de la arqueología gracias a la geomática. Ser piloto de drones certificado me permite asegurar toda la cadena de producción, desde la adquisición de datos hasta la entrega. Utilizo un dron con un escáner Lidar de láseres infrarrojos que permite realizar escaneos de alta densidad. Un vuelo de 15 minutos puede cubrir una gran superficie. Justamente tenemos un proyecto científico para realizar levantamientos aéreos en Lambèse, la última capital de la Numidia durante la era romana", señala Fawzi Doumaz.
Según el científico, el interés en la digitalización del patrimonio tiene como objetivo obtener una copia exacta de los sitios, así como sus dimensiones. "El escáner láser de nube de puntos también permite obtener rápidamente información estructural directa que es difícil de obtener con técnicas antiguas. Este es el caso de los espesores de pared, la naturaleza de los materiales de construcción o restauración, así como la presencia de microfracturas. El plano general puede ser visualizado gracias al gemelo digital".
Consciousness Raising
Fawzi Doumaz estima que en Argelia, hay una conciencia creciente sobre la necesidad de utilizar nuevas tecnologías para la protección del patrimonio. "El desafío es enorme dada la cantidad y diversidad de sitios y monumentos. En Argelia, basta con cavar con un tenedor para hacer descubrimientos arqueológicos. Pero sobre todo es necesario proteger todos estos bienes históricos contra el robo, el vandalismo e incluso el cambio climático. Por lo tanto, es necesario pasar de la conciencia a la toma de decisiones para implementar programas de digitalización y delimitación de sitios. Esta voluntad, una vez afirmada, debe comenzar con una evaluación de la situación. La tecnología está aquí, solo es cuestión de usarla". Para él, es una verdadera carrera contra el tiempo. Las cosas están cambiando dentro de las autoridades públicas, siendo el Estado el responsable de la gestión y el garante de los bienes culturales e históricos. Este año, el tema del mes del patrimonio elegido por el Ministerio de Cultura fue precisamente: "Patrimonio cultural y gestión de riesgos frente a crisis y desastres naturales".
