Los combustibles fósiles (petróleo, carbón...) representan más del 75% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero y cerca del 90% de todas las emisiones de dióxido de carbono. Es uno de los factores más importantes del calentamiento global. Una solución para reducir su uso y preservar mejor el medio ambiente serían comunidades autónomas que utilizan energías limpias. Esto es lo que ha logrado una pequeña isla griega de 899 habitantes en el mar Egeo. Desde 2018, Tilos es energéticamente autosuficiente e incluso logra abastecer parcialmente a islas vecinas.
En la isla, se ha instalado un sistema híbrido de producción de electricidad con financiamiento de la Unión Europea en el marco del programa Horizon 2020. El Proyecto Tilos es el primer sistema híbrido de energía renovable en Europa. Funciona con baterías recargables alimentadas por un aerogenerador de 800 kilovatios y un parque solar fotovoltaico de 400 kilovatios. Este sistema innovador mejora el almacenamiento de la energía excedente producida. De esta manera, permite que la red se mantenga alimentada tanto en días soleados como en días demasiado ventosos para que el aerogenerador funcione.

Una casi independencia energética
La mayor parte del tiempo, la isla es energéticamente autosuficiente. La energía producida en invierno es incluso mucho mayor que la consumida. Durante esta temporada, Tilos exporta su electricidad a través de un cable submarino a las islas vecinas de Kos y Nisyros. En verano, este mismo cable importa la energía necesaria para hacer frente a los picos de visitantes. Debido al turismo y al consiguiente aumento de las necesidades, esta tasa disminuye a 75%.
La primera isla sin residuos del mundo
Las innovaciones no se detienen ahí. Tilos es la primera isla del mundo sin residuos, gracias al programa Just Go Zero Tilos, iniciado por el grupo griego Polygreeen y comenzado en 2023. Gracias a equipos tecnológicos avanzados y nuevas infraestructuras, todos los residuos sólidos urbanos producidos en la isla son recogidos y valorizados según el principio de la economía circular. Actualmente, Tilos recicla el 97,3% de sus residuos. El resto se comprime para producir pellets, un combustible económico y respetuoso con el medio ambiente, que luego se vende. Los vertederos de residuos han sido reemplazados por un centro de innovación circular.

Todos los habitantes de la isla han recibido bolsas especiales para almacenar los desechos. En una bolsa de tela azul, deben colocar todo lo que se pueda reciclar, plástico, vidrio, dispositivos electrónicos, ropa o incluso pilas. Todo debe estar limpio y seco para poder ser reutilizado más tarde. También se proporcionan otras dos bolsas biodegradables. Una para los restos de comida y la otra para desechos como papel higiénico, toallitas desinfectantes y mascarillas quirúrgicas. Luego se colocan en una bolsa grande rígida y se recogen.
El compost generado a partir de desechos se redistribuye
Cada día, los empleados equipados con pequeños coches eléctricos recogen los residuos de las empresas y, cuatro veces por semana, los de los particulares. Se dirigen al centro de economía circular, donde tiene lugar una separación manual, seguida de la compostaje. Las últimas etapas involucran la distribución del compost producido a los residentes que tienen tierras y practican la agricultura. El resto de los materiales reciclables se comprimen, transforman y se transportan a Atenas cada 15 días, luego se venden a diferentes empresas. Ya no hay contenedores de basura en la isla y todos los habitantes, de todas las edades, han sido iniciados en estas prácticas. "Los expertos nos han informado detalladamente sobre lo que debemos hacer y ahora se ha convertido en un hábito diario para nosotros. Incluso nuestros hijos organizan caminatas por su cuenta con el fin de recoger posibles desechos que puedan encontrarse en el camino", dice Jenny Giannopoulou, residente de la isla.
Todo esto no habría sido posible sin el compromiso de la alcaldesa de Tilos, Maria Kammas-Aliiferi. Su perseverancia y fuerte liderazgo han permitido en los últimos doce años la adopción de prácticas "verdes" y una visión sostenible e innovadora. "Un entorno natural saludable es un derecho humano fundamental", afirma. Lo que ha logrado garantizar a sus conciudadanos. Tilos ha sido premiada varias veces a nivel internacional por sus soluciones energéticas innovadoras y su contribución a una Europa sostenible y respetuosa con el clima. Forma parte de la red Natura 2000 y de la Reserva de Vida Silvestre.
